16 June, 2010

Caperucita



Ten cuidado, caperucita
que entre los resquicios
de placer latente que destilas
mas de un lobo querrá devorarte las piernas

Ten cuidado, ménade hasta agotar stock
que lo dulce es con qué se hace el alcohol
y más de un lobo sediento
querrá beber de tus concavidades

Ten cuidado, dulzura
que entre las sombras de tu viaje secreto
tus caderas brillan de rojo intenso

Ten cuidado diva menárquica
que tu debut puede ser tu despedida
ya que los lobos poetas te devoran con ternura
al menos con la mirada

Y te preguntarás por qué los ojos
las fauces, las garras
y por qué tus faldas inocentes son rojas
y por qué te toca estar en el bosque sola

Por eso ten mucho cuidado, caperucita
que tus carnes y primuras son objeto de deseo
y tu danzar por los páramos urbanos
atraen a los faunos cantores

Ten mucho cuidado, novel color de sangre
que tus muslos vuelan por sobre los manzanos
y tus caderas giran ante los ojos del lobo
lo que te llevará al choque, al llanto
y a la triste conclusión
que esto, nunca fue un cuento para niños